Otra vez lentejas. Les estoy cogiendo cariño. Son tan pequeñitas y están tan juntitas para darse calor mutuo -como los pingüinos cuando tienen frío o se aburren- que dan ganas de comérselas todos los días. Cuando se acaben las echaré de menos y recordaré el tiempo que estuvimos juntos. O puedo hacer una cosa... Guardaré una pocas en un taper y las congelaré al estilo Walt Disney -el fundador embalsamado- y de vez en cuando las iré a visitar al frizer para ver cómo están las pequeñuelas. Aunque como este es un comportamiento de chiflados, es mejor que las termine y las eche de menos para siempre.
¿Será verdad lo de que Walt Disney está congelado en algún sitio? Si lo piensas fríamente es sobrecogedor. Un ser humano congelado que pretenden descongelar cuando la ciencia avance. Si Walt despertase de su fantasía lo fliparía con Toy Story y UP en 3D. Y con las cosas de la vida moderna: la termomix, el reciclaje, las nuevas líneas de metro y la Catedral de Don Justo, esa maravilla que el susodicho construyó con desechos y escombros en la localidad de Mejorada del Campo. Un máquina.
Dejo el link de la receta de lentejas.
Abrazos ;)
¿Qué te pasa? ¿Es que de tanto repetir plato -léase lentejas- , te aburres y, como Ferran Adriá, pretendes cerrar el chiringito para inventar nuevos platos y sabores?
ResponderEliminarSaludos
Vautrin
Se ve que las zanahorias llegaron a su fin!! Tienes hierro padarytomar. :D
ResponderEliminarAhora toca repetir, pero esta vez con con un poco de chorizito.
ResponderEliminarEste Walt era un piramides!!!
Jaime tienes la extraña capacidad de empezar hablando de lentejas para terminar hablando de la catedral de Don Justo con una facilidad...jajaja Me encantas.
ResponderEliminarjeje! el chiringuito sigo abierto, de momento...
ResponderEliminarBesos pa los comentersssssssss
Jjajajjaa. Nati, yo creo q lo de Jaime es un súper poder! Lentejas, Walt Disney, catedrales... en general, Benito, en general!
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